La semana pasada se aprobó el Plan de Transporte Metropolitano del Area de Granada (PTMAGR), un ambicioso proyecto que busca conectar mediante transporte público tanto esta capital de provincia como varias poblaciones del area metropolitana. En total algo más del medio millón de habitantes que se esperan para antes de 2030.
Pero no se puede obviar que observando desde las montañas está la estación de esquí de Sierra Nevada, un foco turístico capaz de atraer cada invierno a más del doble de todos esos habitantes que se esperan en el Área Metropolitana de Granada. Y un 68% de estos visitantes suben en transporte privado, creando una gran presión sobre la carretera de a Pradollano, especialmente en días pico en que pueden llegar más de 15.000 personas en pocas horas. El 83% de esos viajes a la estación es de gente que vive o está alojada en Granada,
Aunque el citado documento del PTMAGR no se ha hablado ni aprobado ninguna extensión a las pistas de esquí, sí que se valora la posibilidad de lanzar un estudio de viabilidad que proponga diferentes alternativas para poder llevar a estos visitantes mediante algún tipo de sistema colectivo.
Según reza en el documento de La Junta de Andalucía, a pesar de su relevancia, la conexión actual entre Granada y Sierra Nevada enfrenta varios desafíos. El único principal a la urbanización de Pradollano es la carretera A-395, la cual es la misma que conecta la ciudad de Granada con las áreas residenciales del sur y funciona como ronda sur.
La A-395, que se satura en los días de mayor afluencia, genera serios problemas de congestión tanto en el /salida de la estación de esquí como dentro de la propia urbanización de Pradollano. Además, a esta saturación se suma la dificultad en el monitoreo de la vía, ya que se han detectado discontinuidades en los datos de intensidad media diariade esta carretera, lo que complica una evaluación precisa de su comportamiento.
Aunque existe una red de autobuses urbanos en Monachil que sirve a la estación de esquí, gestionada por su ayuntamiento, y la línea interurbana 395 (concesión VJA-123) conecta con el área, las soluciones actuales no son suficientes para manejar la demanda y los desafíos inherentes a la zona.
Al mismo tiempo existe una linea de bus que conecta a la ciudad de Granada, pero apenas es usada por el 2,2% de los visitantes y tiene una ocupación media de tan solo 4,6 personas por viaje, lo que evidencia la necesidad urgente de soluciones más eficientes y atractivas para el transporte público.
Mirando al Futuro 5u4l1b
Para abordar estos problemas y potenciar la conectividad, el PTMAGR ha propuesto la redacción de dos estudios de viabilidad, en el marco de colaboración público-privada:
- Estudio para un Nuevo Sistema de Transporte Público en Sierra Nevada:
Este análisis se centrará en la implementación de un sistema de transporte público innovador dentro de Sierra Nevada. Su objetivo es descongestionar la A-395, mejorar la accesibilidad a la estación y reducir los tiempos de viaje, lo que, a su vez, traería beneficios económicos, ambientales y contribuiría a la fijación de población en la zona. - Estudio de Alternativas para la Conexión Granada-Sierra Nevada:
Este estudio se enfocará en analizar y proponer soluciones para la mejora del transporte público entre la ciudad de Granada y la estación de esquí. La Dirección General de Movilidad de la Junta de Andalucía liderará este análisis, valorando la colaboración público-privada si se requieren estudios adicionales.
Ambos estudios tienen como objetivo principal mejorar la accesibilidad universal y facilitar la movilidad para todos los s. Es importante destacar que estas futuras actuaciones también consideran la reducción de la vulnerabilidad de la infraestructura de transporte ante el cambio climático.
Aunque la implementación de estos estudios se prevé a largo plazo, estas iniciativas reflejan un compromiso con la mejora de la conectividad y la sostenibilidad de uno de los destinos turísticos más importantes de la provincia.
Con todo, la propuesta de estudio no habla de ninguna solución en concreto. Ya fuera la mejora de la linea de autobús, o quizás extender el metro proyectado hasta una zona donde conectar un funicular, tranvía o el tan hablado teleférico que desde 2006 lleva coleando en esa montaña.

Sierra Nevada y la ciudad de Granada forman un binomio turístico inseparable