La Guardia Civil rescató a dos personas el pasado viernes a las que se les ocurrió salir a hacer montañismo en Sierra Nevada pese a la borrasca 'Martinho'. Además ni siquiera llevaban material adecuado. Un Guardia Civil tuvo que prestarle unos guantes y Sierra Nevada aportar una máquina pisapistas. Las víctimas pretendían subir de esta manera al Mulhacén. Al final fueron encontradas con síntomas de hipotermia.
Según ha informado este cuerpo armado, agentes del Grupo Especial de Rescate e Intervención en Montaña (Greim) actuaron para rescatar a dos personas, un hombre y una mujer de 42 años atrapados por la borrasca en Sierra Nevada.
El rescate se produjo este pasado viernes cuando el servicio de emergencias 112 transfirió la llamada de los rescatados, que habían subido el día anterior de Trevélez a Mulhacén, se encontraban en una zona del Collado de la Carihuela y no podían continuar.
Una pisapistas acerca a los Guardias Civiles en unas condiciones meteorológicas y de nieve muy complicadas
Con la colaboración de una máquina pisanieves de Cetursa, los agentes llegaron lo más cerca que pudieron del refugio de la pareja pero tuvieron que recorrer a pie, de noche y en medio de la ventisca, casi un kilómetro. Lo hicieron con malas condiciones meteorológicas, con temperaturas de hasta -3,5º C, y el hecho de que ya había anochecido dificultó seriamente el rescate.
Cuando localizaron a los dos montañeros, descubrieron que ambos ya presentaban síntomas de hipotermia y congelación, y apenas podían mantenerse en pie, por lo que los agentes del GREIM les proporcionaron material para regresar hasta donde les esperaba la máquina pisanieves.
El rescate seguía siendo complejo porque, a las condiciones meteorológicas se sumó que la zona donde habían intentado resguardarse de la ventisca estaba junto a una pendiente helada, lo que hacía que se tuviesen que desplazar lentamente para evitar una caída.
Finalmente, ya a medianoche, los agentes llegaron de nuevo a la máquina pisanieves junto con los dos montañeros, y los trasladaron hasta el centro de salud de Pradollano para que fuesen atendidos por los servicios médicos. Tras el primer reconocimiento, la pareja fue trasladada al hospital Clínico San Cecilio.
Uno de los guardias civiles que participó en el rescate también tuvo que ser atendido por los servicios médicos de Pradollano, pues cedió sus guantes a uno de los rescatados, lo que le provocó pérdida de sensibilidad en dos falanges.
